El pasado jueves, la mayoría oficialista de MORENA y sus aliados en la Cámara de Diputados aprobaron el Presupuesto 2025, haciendo oídos sordos a los señalamientos críticos realizados desde Acción Nacional. Este ejercicio de autoritarismo legislativo refleja, una vez más, el desinterés del oficialismo por atender las verdaderas prioridades de México.
Con un monto de $9.3 billones de pesos, el presupuesto presenta una disminución real del 1.6% en términos económicos y contempla una nueva deuda de $1.4 billones de pesos, a pesar de las constantes declaraciones del Ejecutivo de no endeudarse. Lo más preocupante no es solo el tamaño del presupuesto, sino cómo se distribuyen los recursos.
Los proyectos insignia de este gobierno —el Tren Maya, la Refinería Dos Bocas y el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA)— continúan absorbiendo miles de millones de pesos, a pesar de sus notorios retrasos, fallas operativas y cuestionamientos sobre su viabilidad. Mientras tanto, sectores fundamentales para el desarrollo de las y los mexicanos sufren recortes alarmantes:
Además, apenas $10 mil millones de pesos se destinan a la reconstrucción y conservación de carreteras, un monto insuficiente para la infraestructura que urge en todo el país.
En Coahuila, el panorama es aún más desalentador. Si bien se proyectan $3 mil millones adicionales para el proyecto "Agua Saludable para La Laguna", esto sobrepasa en más del doble el presupuesto original de $9 mil millones prometido por el presidente López Obrador. Este exceso presupuestal, característico de los proyectos emblema de MORENA, se ve agravado por las irregularidades con empresas proveedoras y los preocupantes resultados iniciales del proyecto, como la contaminación del agua extraída. (Fuente: "Derraman el doble de recursos en Agua Saludable para La Laguna y dan resultados a cuenta gotas", Pie de Página. )
Esta mala administración no solo ha frenado avances importantes, sino que también ha intensificado la crisis hídrica en Torreón, donde las familias enfrentan una creciente escasez de agua. Por otro lado, aunque se asignan $1.8 mil millones al Sistema de Drenaje Pluvial de Torreón, será crucial garantizar que estos recursos se utilicen de manera eficiente y transparente para evitar más ejemplos de despilfarro y corrupción.
Acción Nacional estará vigilante desde la Cámara de Diputados para que estos fondos beneficien realmente a la población y no se pierdan en opacidad o improvisaciones.
Este presupuesto evidencia un desinterés profundo por sectores clave como la salud, la educación y la seguridad, áreas que deberían ser la base de cualquier plan de desarrollo nacional. En su lugar, el gobierno privilegia proyectos que funcionan más como monumentos a la administración que como soluciones para los mexicanos.
MORENA y sus aliados han elegido un camino que deja a estados como Coahuila en una situación vulnerable, con recursos insuficientes para atender sus necesidades prioritarias. Pero desde la oposición, seguiremos alzando la voz para exigir un manejo responsable y justo de los recursos públicos.
El bienestar de las y los mexicanos no puede estar subordinado a caprichos políticos.
El pasado jueves, la mayoría oficialista de MORENA y sus aliados en la Cámara de Diputados aprobaron el Presupuesto 2025, haciendo oídos sordos a los señalamientos críticos realizados desde Acción Nacional. Este ejercicio de autoritarismo legislativo refleja, una vez más, el desinterés del oficialismo por atender las verdaderas prioridades de México.
Con un monto de $9.3 billones de pesos, el presupuesto presenta una disminución real del 1.6% en términos económicos y contempla una nueva deuda de $1.4 billones de pesos, a pesar de las constantes declaraciones del Ejecutivo de no endeudarse. Lo más preocupante no es solo el tamaño del presupuesto, sino cómo se distribuyen los recursos.
Los proyectos insignia de este gobierno —el Tren Maya, la Refinería Dos Bocas y el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA)— continúan absorbiendo miles de millones de pesos, a pesar de sus notorios retrasos, fallas operativas y cuestionamientos sobre su viabilidad. Mientras tanto, sectores fundamentales para el desarrollo de las y los mexicanos sufren recortes alarmantes:
Además, apenas $10 mil millones de pesos se destinan a la reconstrucción y conservación de carreteras, un monto insuficiente para la infraestructura que urge en todo el país.
En Coahuila, el panorama es aún más desalentador. Si bien se proyectan $3 mil millones adicionales para el proyecto "Agua Saludable para La Laguna", esto sobrepasa en más del doble el presupuesto original de $9 mil millones prometido por el presidente López Obrador. Este exceso presupuestal, característico de los proyectos emblema de MORENA, se ve agravado por las irregularidades con empresas proveedoras y los preocupantes resultados iniciales del proyecto, como la contaminación del agua extraída. (Fuente: "Derraman el doble de recursos en Agua Saludable para La Laguna y dan resultados a cuenta gotas", Pie de Página. )
Esta mala administración no solo ha frenado avances importantes, sino que también ha intensificado la crisis hídrica en Torreón, donde las familias enfrentan una creciente escasez de agua. Por otro lado, aunque se asignan $1.8 mil millones al Sistema de Drenaje Pluvial de Torreón, será crucial garantizar que estos recursos se utilicen de manera eficiente y transparente para evitar más ejemplos de despilfarro y corrupción.
Acción Nacional estará vigilante desde la Cámara de Diputados para que estos fondos beneficien realmente a la población y no se pierdan en opacidad o improvisaciones.
Este presupuesto evidencia un desinterés profundo por sectores clave como la salud, la educación y la seguridad, áreas que deberían ser la base de cualquier plan de desarrollo nacional. En su lugar, el gobierno privilegia proyectos que funcionan más como monumentos a la administración que como soluciones para los mexicanos.
MORENA y sus aliados han elegido un camino que deja a estados como Coahuila en una situación vulnerable, con recursos insuficientes para atender sus necesidades prioritarias. Pero desde la oposición, seguiremos alzando la voz para exigir un manejo responsable y justo de los recursos públicos.
El bienestar de las y los mexicanos no puede estar subordinado a caprichos políticos.