Guillermo Anaya Lamas fue alcalde de Torreón en el periodo de 2003 a 2005, su ejercicio como presidente municipal fue ejemplar, quizá el mejor en la historia de la ciudad, aquí haremos un repaso de los aciertos de "Memo", como le llaman en su región.
José Guillermo Anaya Lamas nace el 2 de julio de 1968, y como muchos exitosos de su carrera, salió de la Universidad Iberoamericana de Torreón siendo un licenciado en Derecho, posteriormente hizo una maestría en derecho corporativo.
A sus cortos 25 años, el ya talentoso abogado fundó su despacho jurídico que aún ostenta en 1993. Todavía sin incursionar en la política, con G&A Asociados comenzó a ser apasionado del potencial que tenían las leyes para cambiar la realidad de la ciudad que le vio nacer y que siempre ha querido, Torreón.
Tan sólo 4 años después es electo diputado local del Congreso de Coahuila, donde aportaría desde la cámara legislativa del estado a solucionar las necesidades de los coahuilenses entre 1997 y 1999.
En estos años, Guillermo Anaya Lamas no sólo se convirtió en el diputado presidente del Congreso, lo cual hizo de manera ejemplar, puesto que después se convirtió en diputado federal por el estado de Coahuila, en el nuevo milenio (año 2000).
Posteriormente, el exitoso político y abogado decidió concursar para ser la cabeza del municipio que lo vio nacer. Anaya Lamas llegó a ser la alternativa de gobierno, sucediendo al PRI de Salomón Juan Marcos Issa que gobernó antes.
Después de acabar su periodo de gobierno, Memo Anaya se postula para ser senador del Congreso de la Unión y lo logra, quedándose allí 6 años abogando por las necesidades de Coahuila a nivel federal.
Durante ese mismo periodo, el político panista se convierte también en secretario general del partido durante un año en diciembre del 2007.
El último puesto que representó Guillermo Anaya Lamas fue el de diputado del Congreso de la Unión por segunda vez del 2012 al 2015.
Vale la pena reconocer que este político y abogado orgullosamente torreonense ha seguido siempre sus convicciones, manteniéndose dentro del Partido Acción Nacional que él conoce y sabe lo que representa.
Guillermo Anaya ha sido partícipe del poder legislativo a nivel estatal y a nivel federal en 5 ocasiones, tanto como senador, como diputado federal y local, por eso es importante recordar algunos de los que abordó este político coahuilense, quien ha demostrado interesarse en las necesidades de la ciudadanía y de su estado donde vive.
Por ejemplo, en 2009, como senador, Guillermo Anaya promovió una ley secundaria que cuidaba los datos personales de los mexicanos, defendiendo sus derechos a la privacidad y la necesidad de seguridad pública en materia de información.
En ese año, la iniciativa fue desechada, pero no mucho tiempo después el tema tomó relevancia internacional y gracias a la iniciativa de este senador panista, y otras, hoy existen instituciones y leyes que cuidan de la información ciudadana.
Otro ejemplo de su trabajo es la proposición con punto de acuerdo en relación con la deuda pública de Coahuila de Zaragoza que hizo Guillermo Anaya como senador, en 2011, donde tomó en cuenta el terrible daño a la hacienda pública que estaba sucediendo en su estado.
En este asunto, el legislador señaló que la Procuraduría Fiscal ha presentado ya 5 denuncias penales en contra del gobierno de Humberto Moreira, cuyo gobierno mediante falsificación de documentos continuaba solicitando créditos para supuestas inversiones en Coahuila.
Si no fuera por los pronunciamientos de Guillermo y otros diputados y diputadas, posiblemente el desfalco podría haber seguido sucediendo y la que conocemos como Megadeuda sería todavía más.
Una más, en octubre del 2012, como diputado federal, Guillermo Anaya suscribió una iniciativa para "eliminar la figura del fuero, la de declaración de procedencia o desafuero y la de juicio político", lo cual defendía la rendición de cuentas que deben tener los servidores públicos que comenten omisiones o faltas en su trabajo.
Al igual que muchas iniciativas que impulsó este dedicado legislador panista, esta fue desechada, pero sirvió para cimentar la futura cancelación del fuero a políticos que llegó hasta el año 2018.
Guillermo Anaya Lamas, como alcalde de Torreón tuvo un éxito rotundo, específicamente por una cosa que nos hace falta mucho aquí en el estado: la buena administración.
Este político lagunero hizo una cosa que nadie había podido hasta su gestión y que dejó una herencia administrativa que hasta la fecha se le agradece. Dejó a Torreón con 0 deuda.
Y es que si Guillermo Anaya se centró en algo fue en la administración del erario público. Se encargó de que no hubiera gastos hormiga y que todos sus proveedores estuvieran trabajando con precios justos.
Fue así y mediante un equipo competente y con las mismas ganas para hacer un bien a Torreón que Guillermo Anaya, a pesar de invertir en infraestructura y tener exitosos programas para las personas, dejó una deuda cero, algo que quienes lo recuerdan aún agradecen, sobre todo porque es un tema que duele a la ciudadanía coahuilense.
Tiene sentido, porque Memo no sólo es un político que sabe moverse bien con las personas, si no que además es un gran administrador, no por cualquier cosa ha llevado su despacho de abogados a un lugar financieramente estable y bien organizado.
A los políticos hay que rendirles cuentas hasta con sus propios negocios y Guillermo Anaya ha comprobado que tanto en su familia, como en su negocio y por supuesto en su ejercicio como funcionario, siempre ha sabido ser honesto con el dinero y tener las cuentas claras con todo mundo.
Un segundo logro en este sentido es que, por lo mismo, por su naturaleza honesta, eliminó a los aviadores del municipio que también absorbían el presupuesto público e hizo eficiente el gasto del ayuntamiento.
Además, como tercer punto, Guillermo Anaya levantó el ánimo de los ciudadanos. Quizá por ser una alternativa ejemplar, su gobierno acercó a la ciudadanía y fue con él cuando diversas organizaciones de la sociedad civil empezar a ver la luz, puesto que su apertura hacia la ciudadanía así lo provocó.
Guillermo Anaya también es reconocido por manejar buena relación con el rubro empresarial y esto es vital para poder desarrollar proyectos innovadores, dar riqueza al municipio y lograr tratos con la iniciativa privada para abonar a la economía local y mejorar la calidad de vida de muchos, eso lo aprovechó muy bien durante su trienio en Torreón.
Muchos fueron los aciertos del alcalde con un sorprendente currículum político, pero quizá el siguiente que es recordable es su dedicado enfrentamiento contra la corrupción.
Por supuesto que en 3 años no pudo acabar con este cáncer para la sociedad mexicana, pero gracias a su gobierno, a poner en el mapa la rendición de cuentas, la transparencia y la participación ciudadana, se desarrollaron proyectos ciudadanos que hoy han reducido la corrupción y abonaron, en parte a la fundación del Sistema Estatal Anticorrupción en Coahuila y la misma Fiscalía Estatal Anticorrupción.