Mientras miles de pacientes en México enfrentaban el desabasto de medicamentos, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) adjudicó más de mil 100 millones de pesos en contratos sin licitación a dos empresas vinculadas al yerno de Rocío Nahle, entonces secretaria de Energía y hoy gobernadora de Veracruz, según una investigación de Animal Político. Estos contratos se dieron con sobreprecios de hasta 885% y, en varios casos, sin evidencia de entrega completa de los productos.
Las compañías Ethomedical S.A. de C.V. y Abastecedora de Medicinas y Materiales S.A. de C.V., relacionadas con Aldo Díaz Pérez, exfuncionario de Segalmex y socio de Fernando Bilbao Arrieta, yerno de Nahle, fueron beneficiadas con 761 adjudicaciones directas entre 2020 y 2024 en al menos 20 estados del país.
Los sobreprecios fueron escandalosos. Por ejemplo:
Ethomedical era una empresa prácticamente desconocida antes del gobierno de Andrés Manuel López Obrador. Su “bonanza” inició en 2020, cuando María Teresa Muñoz Caraveo, esposa de Aldo Díaz Pérez, compró acciones. Ese mismo año, la compañía comenzó a recibir contratos que sumaron mil 134 millones de pesos en solo dos años.
Una vez sancionada por la Cofepris como proveedor irregular, el negocio fue continuado por otra empresa de la red familiar: Abastecedora de Medicinas y Materiales, en la que participan los hijos de Díaz Pérez. Solo en 2023 y 2024, esta nueva empresa obtuvo 63 millones de pesos en contratos.
Mientras estas empresas hacían negocios millonarios, pacientes como Sara Montenegro, extrabajadora del IMSS y diagnosticada con cáncer, tuvieron que hipotecar su casa para pagar sus tratamientos ante el desabasto en clínicas públicas.
Sara no es un caso aislado. Según la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares, en 2022 el gasto de las familias en medicamentos aumentó 39% respecto a 2018. En los hogares más pobres, el gasto se duplicó.
La investigación realizada por Animal Político revela que al analizar un tercio de los contratos de Ethomedical se detectó un sobreprecio global de 79%. Al aplicar ese margen a los mil 134 millones de pesos adjudicados, se estima que el IMSS pagó 500 millones de pesos “de más”.
Una segunda revisión, comparando los precios con los de otros proveedores, arrojó un sobrecosto de 438 millones de pesos.
Por ejemplo:
Incluso hubo compras fraccionadas en un mismo día, como ocurrió en el Estado de México-Oriente, donde se hicieron siete contratos consecutivos por montos menores para simular adquisiciones pequeñas que, en conjunto, sumaron más de 4.5 millones de pesos.
En 2022, la Cofepris calificó a Ethomedical como “distribuidor irregular”, tras detectar que su almacén no existía, tenía fauna nociva, sin infraestructura adecuada y sin sistema de inventario.
Pese a estas irregularidades, Ethomedical y su red continuaron siendo contratadas incluso por Birmex, la empresa estatal encargada de distribuir medicamentos.
Durante el sexenio de López Obrador, su gobierno intentó en cinco ocasiones reformar el sistema de compras de medicamentos. Todas fracasaron. En lugar de generar ahorros, el gasto aumentó. De 61 mil millones de pesos en 2018, se pasó a 79 mil millones en 2024, un incremento del 29%.
Y no solo se gastó más: se compraron menos medicinas. El resultado fue que el gobierno dejara de surtir más de 15 millones de recetas, cinco veces más que en el sexenio anterior.
Mientras el gobierno federal presumía austeridad, una red vinculada al círculo familiar de Rocío Nahle se enriquecía vendiendo medicinas más caras, muchas veces sin entregarlas. El caso de Ethomedical expone una de las redes de corrupción más graves del sexenio de López Obrador, con consecuencias directas en la salud y la vida de millones de mexicanos.
Fuente: https://animalpolitico.com/salud/imss-contratos-medicamentos-rocio-nahle-yerno
Mientras miles de pacientes en México enfrentaban el desabasto de medicamentos, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) adjudicó más de mil 100 millones de pesos en contratos sin licitación a dos empresas vinculadas al yerno de Rocío Nahle, entonces secretaria de Energía y hoy gobernadora de Veracruz, según una investigación de Animal Político. Estos contratos se dieron con sobreprecios de hasta 885% y, en varios casos, sin evidencia de entrega completa de los productos.
Las compañías Ethomedical S.A. de C.V. y Abastecedora de Medicinas y Materiales S.A. de C.V., relacionadas con Aldo Díaz Pérez, exfuncionario de Segalmex y socio de Fernando Bilbao Arrieta, yerno de Nahle, fueron beneficiadas con 761 adjudicaciones directas entre 2020 y 2024 en al menos 20 estados del país.
Los sobreprecios fueron escandalosos. Por ejemplo:
Ethomedical era una empresa prácticamente desconocida antes del gobierno de Andrés Manuel López Obrador. Su “bonanza” inició en 2020, cuando María Teresa Muñoz Caraveo, esposa de Aldo Díaz Pérez, compró acciones. Ese mismo año, la compañía comenzó a recibir contratos que sumaron mil 134 millones de pesos en solo dos años.
Una vez sancionada por la Cofepris como proveedor irregular, el negocio fue continuado por otra empresa de la red familiar: Abastecedora de Medicinas y Materiales, en la que participan los hijos de Díaz Pérez. Solo en 2023 y 2024, esta nueva empresa obtuvo 63 millones de pesos en contratos.
Mientras estas empresas hacían negocios millonarios, pacientes como Sara Montenegro, extrabajadora del IMSS y diagnosticada con cáncer, tuvieron que hipotecar su casa para pagar sus tratamientos ante el desabasto en clínicas públicas.
Sara no es un caso aislado. Según la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares, en 2022 el gasto de las familias en medicamentos aumentó 39% respecto a 2018. En los hogares más pobres, el gasto se duplicó.
La investigación realizada por Animal Político revela que al analizar un tercio de los contratos de Ethomedical se detectó un sobreprecio global de 79%. Al aplicar ese margen a los mil 134 millones de pesos adjudicados, se estima que el IMSS pagó 500 millones de pesos “de más”.
Una segunda revisión, comparando los precios con los de otros proveedores, arrojó un sobrecosto de 438 millones de pesos.
Por ejemplo:
Incluso hubo compras fraccionadas en un mismo día, como ocurrió en el Estado de México-Oriente, donde se hicieron siete contratos consecutivos por montos menores para simular adquisiciones pequeñas que, en conjunto, sumaron más de 4.5 millones de pesos.
En 2022, la Cofepris calificó a Ethomedical como “distribuidor irregular”, tras detectar que su almacén no existía, tenía fauna nociva, sin infraestructura adecuada y sin sistema de inventario.
Pese a estas irregularidades, Ethomedical y su red continuaron siendo contratadas incluso por Birmex, la empresa estatal encargada de distribuir medicamentos.
Durante el sexenio de López Obrador, su gobierno intentó en cinco ocasiones reformar el sistema de compras de medicamentos. Todas fracasaron. En lugar de generar ahorros, el gasto aumentó. De 61 mil millones de pesos en 2018, se pasó a 79 mil millones en 2024, un incremento del 29%.
Y no solo se gastó más: se compraron menos medicinas. El resultado fue que el gobierno dejara de surtir más de 15 millones de recetas, cinco veces más que en el sexenio anterior.
Mientras el gobierno federal presumía austeridad, una red vinculada al círculo familiar de Rocío Nahle se enriquecía vendiendo medicinas más caras, muchas veces sin entregarlas. El caso de Ethomedical expone una de las redes de corrupción más graves del sexenio de López Obrador, con consecuencias directas en la salud y la vida de millones de mexicanos.
Fuente: https://animalpolitico.com/salud/imss-contratos-medicamentos-rocio-nahle-yerno